En su revisión de las pruebas disponibles, los autores llegan a algunas conclusiones sorprendentes, algunas de las cuales ponen en cuestionamiento los supuestos sobre el cannabis:
- Aunque el cannabis puede tener un impacto negativo sobre la salud, incluida la mental, el daño en términos relativos es mucho menor que el del alcohol o el tabaco. Históricamente, sólo ha habido dos muertes en todo el mundo atribuidas al cannabis, mientras que el alcohol y el tabaco juntos son responsables de más de 100.000 muertes al año sólo en el Reino Unido.
- Muchos de los daños asociados al consumo de cannabis son el resultado de la prohibición en sí, en particular los daños sociales derivados de la detención y el encarcelamiento.
- Las políticas que controlan el cannabis, sean draconianas o liberales, parecen influir poco en la prevalencia de su consumo.
- En un sistema alternativo de oferta regulada, controles de mercado como los impuestos, los mínimos de edad legales para el consumo y la compra, el etiquetado y la fijación de límites sobre la potencia podrían ayudar a minimizar los daños asociados al consumo de cannabis.
Véase el
comunicado de prensa (en inglés)
Véase las conclusiones y recomendaciones (en español)
Para descargar un informe ejecutivo del informe: An Overview of Cannabis Policy: Moving Beyond Stalemate, Beckley Briefing Paper 17
Beckley Foundation’s Global Cannabis Commission
Septiembre de 2008