La actual política de cannabis de Suiza se enfrenta a numerosos desafíos: una aplicación insatisfactoria de la ley sobre estupefacientes con respecto a las personas que usan cannabis, un mercado de cannabis de CBD muy visible y legal, intentos de cantones y ciudades por efectuar experimentos de distribución de cannabis, seguramente una iniciativa popular y una demanda creciente de cannabis medicinal. Estos numerosos desafíos deberían indicar que Suiza podría cambiar su política en un futuro no muy lejano.
Algunas ciudades y cantones desempeñan un papel importante en la situación actual, ya que es difícil que las autoridades federales ignoren sus llamamientos a favor de un cambio en la política. La decisión de apostar por la única vía legal que prevé la ley federal (los ensayos cientí cos) ha limitado en cierto modo el alcance de su acción, con proyectos que, muchas veces, son experimentos científicos de pequeña escala y orientados a la salud pública. A escala nacional, el cambio más probable e inmediato que cabe esperar en este momento es el de la ley sobre estupefacientes, tras lo que se permitiría realizar ensayos no médicos con el cannabis. No obstante, no está claro si esta propuesta podrá reunir el respaldo de una mayoría parlamentaria.
Se podría dar la situación de que varias de las cuestiones relacionadas con la política de cannabis (problemas con la aplicación de la ley actual, la regulación del mercado del CBD, el número creciente de solicitudes de cannabis medicinal, etcétera) desencadenen una revisión parcial de la ley sobre estupefacientes. Pero en lugar de propiciar el gran cambio, de este modo se solucionarían los problemas uno por uno. Esta opción no se está discutiendo, pero sigue siendo el modelo por defecto.